Estás frente a un viejo baúl cubierto de polvo en el ático de una casa antigua. Al abrirlo, encuentras una colección de diarios de viaje escritos por mujeres, cada uno con la historia de una mujer que, en su tiempo, se atrevió a explorar lo desconocido. Estas páginas no son sólo registros de lugares y fechas; son ventanas a almas valientes que se lanzaron a la aventura, a menudo contra viento y marea.
Tomemos, por ejemplo, el diario de una mujer que recorrió sola la Ruta de la Seda en bicicleta en los años 30. Habla de los paisajes que sus ojos vieron y de las personas que conoció en el camino, pero también de las noches de soledad bajo un cielo estrellado, donde se enfrentó a sus miedos y descubrió su fortaleza interior.
O piensa en las palabras de una joven que navegó los mares del sur, compartiendo sus reflexiones sobre el choque de culturas y la búsqueda de un sentido de pertenencia en un mundo en constante cambio.
Estos diarios de mujeres redefinen el viaje. Son testimonios de lucha, superación y profunda introspección. Nos muestran cómo, a través de la exploración del mundo, estas mujeres profundizan su ser, enfrentando desafíos físicos, emocionales y espirituales. En sus páginas, encontramos lecciones sobre la importancia de seguir nuestros sueños, de ser valientes frente a lo desconocido y de la búsqueda constante de nuestra propia voz en un coro que a menudo intenta silenciarnos.
¿Las leemos?
6 diarios de viaje escritos por mujeres
«Diario Ártico: Un año entre los hielos y los Inuit» por Josephine Peary
¿Te imaginas pasar un año entero en Groenlandia? Rodeada de hielo, nieve y un paisaje que quita el aliento, pero también pone a prueba cada fibra de tu ser. Eso fue lo que vivió Josephine Cecilia Diebitsch Peary (1863 – 1955). Publicado en 1891, este diario de viaje es un testimonio raro y fascinante de la exploración polar desde los ojos de una mujer, pero también una crónica íntima de su convivencia con las comunidades Inuit. Un libro que también es un puente hacia el entendimiento de una realidad lejana, contado con la sensibilidad y la perspectiva única de una mujer que no solo observó, sino que vivió y respiró la esencia del Ártico.
«Japón inexplorado» de Isabella Bird
Una puerta a un Japón del siglo XIX, visto a través de los ojos de una mujer adelantada a su tiempo. Isabella Bird, una exploradora británica nacida en 1831, rompió todos los moldes de su época, viajando a rincones del mundo donde pocas personas, y aún menos mujeres, se habían atrevido a ir. En este libro, Bird nos lleva de la mano por un Japón apenas tocado por el Occidente, compartiendo con nosotros sus aventuras, encuentros y descubrimientos de una manera tan cercana que te sientes caminando a su lado. Lo que hace especial a «Japón Inexplorado» es cómo Isabella mezcla sus observaciones detalladas y amor por la naturaleza con encuentros culturales profundos, todo narrado con una curiosidad insaciable y un espíritu intrépido.
«El valle feliz» por Annemarie Schwarzenbach
Publicado en 2016 en castellano, este libro nos lleva de la mano de Annemarie Schwarzenbach (1908 – 1942), una viajera del alma y del mundo, que con su pluma nos dibuja un mapa de su corazón y sus aventuras. Esta mujer, que vivió rápido y murió joven a los 34 por un accidente en bicicleta, nos cuenta cómo fue lanzarse a lo desconocido, enfrentando desde la angustia existencial hasta el amor y la muerte, todo con una sinceridad que te toca el alma. Doctora, arqueóloga, periodista y fotógrafa, Annemarie fue sobre todo una escritora de viajes que, con su vida y obra, nos enseña que viajar es mucho más que moverse de un lugar a otro; es explorar los rincones más profundos de nuestro ser. «El Valle Feliz» es ese viaje: intenso, real y tremendamente humano, que nos muestra que, a pesar de las tormentas, siempre hay un camino por descubrir.
«Del viaje como arte» de Edith Wharton
Nacida en Nueva York en 1862, revoluciona la idea de los diarios de viaje. Wharton, con su estilo único, nos muestra que viajar es todo un arte. Este libro nos sumerge en sus aventuras por el mundo, enseñándonos a mirar cada experiencia como una obra de arte. No es solo un relato de los lugares que visitó, sino cómo los vivió, invitándonos a transformar nuestros propios viajes en experiencias memorables. Nos lleva desde su querida Nueva York hasta los lugares más exquisitos, ofreciéndonos una perspectiva fresca sobre el arte de viajar.
«Cinco viajes al infierno: aventuras conmigo y ese otro»de Martha Gellhorn
Nacida en 1908 y fallecida en 1998, fue una figura emblemática: libre, rebelde, apasionada y con una mordacidad que no perdonaba estupidez ni miseria moral. Este libro narra viajes llenos de desafíos y nos cuenta cómo se sumergió en el periodismo de guerra, comenzando en el frente de Madrid durante la Guerra Civil Española, donde se codeó con nombres como Hemingway y Robert Capa. Comparte las aventuras y horrores que vivió, y su lucha interna por encontrar un lugar de normalidad en medio del caos, de ahí que hayamos decidido incluirla en este listado de diarios de viaje escritos por mujeres, porque hay mirada íntima.
«De Viaje» de Virginia Woolf
Es una invitación a tomarse un café con una de las mentes más increíbles y charlar sobre todos esos rincones del mundo que ha pisado y reflexionado. No esperes un simple recuento de viajes; esto es Woolf en su esencia, mezclando lo personal con lo observado, todo servido con su inconfundible estilo que te hace sentir en confianza, como si estuvieras en una conversación profunda con ella. Y aunque no es un diario de viaje en el sentido tradicional, «De Viaje» se gana su lugar en esta lista porque nos ofrece una exploración de mundos tanto externos como internos, marcando rutas no solo por geografías, sino por los paisajes emocionales y mentales de Woolf. Nos enseña que viajar no es solo moverse de un lugar a otro, sino cómo vemos y qué sentimos sobre los lugares que visitamos y las experiencias que vivimos.
Al volver a cerrar ese viejo baúl en el ático, es como si cerráramos también una puerta secreta a mundos lejanos y tiempos pasados. Pero aquí está el quid: aunque guardemos estos diarios de viaje escritos por mujeres, las historias que contienen siguen vivas, latiendo con fuerza y desafiando el polvo del olvido. Han convertido cada rincón desconocido del mundo en un hogar narrado, cada desafío en una victoria íntima, y cada página es un recordatorio de que el verdadero viaje empieza en el corazón y la mente.
Estas mujeres, con sus historias y una rebeldía contra lo convencional, no solo han redefinido lo que significa viajar; han trazado rutas hacia lo más profundo de nuestra alma, invitándonos a seguir nuestros propios sueños, a enfrentar lo desconocido con valentía y a no dejar de buscar nuestra voz. Así que, aunque el baúl se cierre, la invitación está hecha. Nos toca abrir nuestros propios mapas inspirados por estas exploradoras, y preguntarnos: ¿hacia dónde nos llevarán nuestros próximos viajes? ¿Qué estamos buscando en ellos?